Permitidme, amigos de “La Pizarra de Gaude”, que así, "a
vuela tecla”, os muestre mi sorpresa ante lo que acabo de escuchar y después –ante
mi incredulidad- leer.
Escucho en la radio que quieren aclararnos lo que
significa la palabra orilla en la narrativa de Miguel Delibes. ¡No
puede ser! Me dije al escuchar que un “experto” nos lo iba a
aclarar. Pero sí, sí, habló y nos lo aclaró.
Os puedo asegurar que si a mí me hubieran preguntado por una
palabra que por lo usada -desde tiempo inmemorial- no estuviera en trance de desaparecer (ni siquiera en desuso),
y que, además, todo el mundo entendiera, entre las primeras hubiera estado orilla.
No dando crédito a lo que mis pabellones auditivos recogen, recurro a todos los diccionarios
que la Real Academia Española ha editado. Allí está la palabra con los mismos
significados que siempre tuvo como adverbio de lugar que, creo (de esto no me hagáis mucho caso, ya sabéis que la academia no es lo mío) es:
Diccionario de Autoridades, año 1726-1739.
A la orilla. Phrase adverb. que vale cercanamente, o con immediación. La.t Ad. Apud. QUEV. Mus. 5. Xac. 10.
A la orilla. Phrase adverb. que vale cercanamente, o con immediación. La.t Ad. Apud. QUEV. Mus. 5. Xac. 10.
Diccionario de la Lengua Castellana, año 1791.
A LA ORILLA. mod. adv. Cercanamente, ó con inmediacion. (he transcrito).
A LA ORILLA. mod. adv. Cercanamente, ó con inmediacion. (he transcrito).
Diccionario de la Lengua Española, año 2014.
a la orilla
a la orilla
1. loc. adv. Cercanamente o con inmediación.
En estos diccionarios, en boca de mis abuelos, y en boca de
este abuelo y su entorno, la palabra orilla sigue usándose con el mismo significado de siempre. Así la usamos:
Junto al pino (orilla del pino). Cerca de la pared (orilla de la pared). Al lado de la
fuente (orilla de la fuente). Próximo a mi casa (orilla de mi casa). Al lado
de la cuna (orilla de la cuna). Al lado
del sofá (orilla del sofá). Cerca de
La Cibeles (orilla de La Cibeles).
Junto a la pata de la mesa (orilla
de la pata de la mesa)… etc. etc. etc. y todos los "etecés" que usted quiera.
Después de mostraros mi sorpresa, sólo me queda preguntar:
¿en la ciudad (los nuevos urbanitas) creen que la palabra orilla está en peligro? ¿No la usan? ¿suena raro? de momento parece que no la conocen demasiado.
Bueno, pues no, la palabra orilla (así lo creo) no está en peligro, ni creo que necesite (salvo alguna excepción) de ninguna aclaración para comprender su significado. Si después de ver y escuchar que los
paletos la usamos como siempre, recurrimos a los diccionarios desde que existen
y la recogen como la usaban y la usamos, lo que quizás haya que aplicar aquello de… “¡oigaaa!
¿es la jefatura de tráfico? Es que mire, voy por la autopista... "2017" y todos los coches me vienen de cara, circulan en dirección contraria, tomen medidas urgentes porque
existe peligro de que choquen de cara conmigo”.
Bueno pues… os digo que aquí, orilla de la ventana que estoy, me aso de calor a pesar de que
fuera hay tres grados; y es que el sol le pega… ¡cómo le pega! Y eso que no
está orilla.
Camporredondo, 16 de
noviembre de 2017
No hay comentarios:
Publicar un comentario