Comprenderéis, amigos, que si Delibes habla de ovejas -y su “experto”
también-, si un ex-pastor no se pronuncia acerca del tema, quedaría un poco
deslavazado ¿o no? ¡Pues vamos allá!:
Galápago
LR p. 145
(...) pues según sabía por el Centenario, la oveja que come centellas cría galápago en el hígado (...)
Galápago: En las ovejas, enfermedad que las lleva a la muerte después de unos 10-15 días. Es una especie de cirrosis. El animal va languideciendo y mostrándose triste hasta que, finalmente, muere. (Investigación de campo)
(...) pues según sabía por el Centenario, la oveja que come centellas cría galápago en el hígado (...)
Galápago: En las ovejas, enfermedad que las lleva a la muerte después de unos 10-15 días. Es una especie de cirrosis. El animal va languideciendo y mostrándose triste hasta que, finalmente, muere. (Investigación de campo)
Os lo presento tal cual aparece en Cátedra Miguel Delibes (y en
los “diccionarios” del mismo autor que publica al amparo de la Cátedra). Pero hay más: en el programa
“Es el campo” de Es radio CyL, (5-10-2016) tuve ocasión de escucharlo y observé
que el “experto” en nada ha variado su manera de entenderlo, sino que lo ha
ampliado. Dice, exactamente, lo mismo que ya dijo en sus intervenciones
anteriores en los otros medios, más su explicación añadida.
Quiero acudir en defensa del entrevistado por la
presentadora: ésta le preguntó si sabía lo que era el galápago, y yo creo que
respondió adecuadamente, dijo: Como no sea un animal… y claro, como para eso
está el “experto” en Delibes… la locutora reclamó su auxilio.
El señor “experto” -que sigue sin entender el lenguaje
rural y por ende el del escritor- dice: no, según Delibes no es un animal, es
una enfermedad, una especie de cirrosis y nos larga lo que él ha entendido,
eso sí, poniéndolo siempre en la pluma del escritor… porque ésa es su fuerza, más
ahora que Delibes no está.
Para que no tengáis que acudir a vuestra librería, os transcribo
lo que Delibes escribió en “Las Ratas”: “Por Nuestra Señora de la Luz brotaron las centellas
en el prado y el Nini se apresuró a enviar razón al Rabino Grande para que
alejara las ovejas, pues según sabía por el Centenario, la oveja que come
centellas cría galápagos en el hígado y se inutiliza”.
Como podemos leer, Delibes no hace mención a
enfermedad ninguna, así como tampoco a que en 10 o 15 días la oveja muere. El
escritor nos dice que la oveja cría galápagos por comer centellas. Lo demás es
fruto de la tan socorrida (investigación
de campo) que de tanta ayuda le sirve al señor Urdiales. Entretanto
seguimos sin saber en qué entorno se produce la “(investigación de campo)” que, a nosotros, nos daría ocasión de
consultar para ampliar nuestra exigua cultura rural.
Viene la opinión del ex-pastor que dice: señor al que
preguntó la locutora, usted tenía razón; el galápago –además de islas y
tortugas- es un animal. Es un animal, en forma de lombriz, que puede invadir el cuerpo de la oveja si ésta ha comido centellas. Delibes sólo dice centellas (plantas), pero hay
otros posibles motivos como, más adelante, veremos.
¿La oveja, enferma –según Delibes- por haber comido
centellas? ¡Pues parece que sí! Pero la enfermedad que la lleva a la muerte es
la producida por un animal (lombriz) que se llama galápago y que invade su
cuerpo –también el hígado- provocándole la muerte.
Aparte de la decadencia en que entra la oveja que
padece de galápagos (lombrices), hay otro síntoma externo y es que, decimos,
tiene papada. Esto –no soy veterinario- parece que es provocado (la papada, o
papera) por los galápagos que invaden el hígado del animal.
De manera que, entrevistado y bien informado señor, el
galápago es un animal. Animal que invade el cuerpo de la oveja y puede provocar
su muerte en breve espacio de tiempo.
Comentario: Delibes no dice que el galápago es una
enfermedad. Lo que el escritor dice es que la oveja que come centellas cría
galápagos y sí, es cierto, los galápagos (lombrices) acaban matando al animal.
Los galápagos, exactamente igual que el lobo, no son una enfermedad de la
oveja, aunque unos y otro la maten.
Galápago: animal en forma de lombriz que se instala en
distintas partes del cuerpo de la oveja –también en el hígado y pulmones- y que puede acabar matándola.
Y vamos con los galápagos de Camporredondo, y su posible
afectación a la oveja. Para este ex-pastor -y su entorno- siempre que una oveja
enfermaba y uno de los síntomas era que tenía papada, decíamos que tenía
galápagos y nosotros, incultos como dice el “experto” en Delibes, lo
achacábamos a que había bebido agua estancada en un estanque en el que había galápagos.
También decíamos que por comer hierba cerca de la cagada de un perro (por
aquello de las lombrices). De ahí que la oveja tuviera galápagos. No, nunca oí
que fuera por comer centellas, y otras hierbas, aunque también puede ser: yo lo
ignoro
Lo del agua estancada y los galápagos también lo
decíamos cuando en una pequeña laguna de agua veíamos, de niños,
muchos bichos del estilo de las lombrices. Decíamos: no hay que meterse ahí
porque está lleno de galápagos. Así que nosotros, a todo aquello que tuviera
forma de lombriz, lo llamábamos galápago.
Resumiendo: el galápago es un animal (especie de
lombriz). Se fija en distintas partes del interior de la oveja en cuya salud
produce muy graves problemas. ¿Es una enfermedad de la oveja? No. Es un animal,
o bicho, que provoca graves alteraciones en la salud de la oveja, entre otras
provocar papadas o paperas –no sé que será más correcto- y llega a ocasionar su
muerte.
Otra cosa que ignoro es si el problema que acarrea el
galápago en el hígado de la oveja se llama cirrosis –veterinarios tiene la
ciencia que lo podrán responder-.
Así que: Delibes nunca dijo que el galápago fuera una
enfermedad de la oveja. Sólo dijo que la oveja que comía centellas criaba
galápagos. Tampoco dijo que muriera en 10 o 15 días, esto es fruto de la (investigación de campo) del señor Urdiales, a la
que yo no puedo acudir, para contrastar, porque no sé donde se realizó la
investigación.
Hace más de cien años ya era así y, mientras algún
experto no nos convenza de lo contrario, así seguirá siendo en Camporredondo.
Nota final:
1.- por falta de base científica, lo único que no
admite duda es que el galápago es un animal en forma de lombriz. Tiene
este nombre porque los humanos hace muchos, muchos años, así lo decidieron.
2.- que se instala en el interior de la oveja
creándole graves problemas de salud.
3.- que hay distintas creencias de cómo llegan al
interior de la oveja.
4.- que Delibes nunca dijo que fuera una enfermedad de
la oveja, sino que el Nini aprendió del Centenario que la oveja que comía
centellas criaba galápagos.
5.- que no leemos, o mal interpretamos, lo que el
escritor escribió.
He dicho, lo que he dicho, en:
Camporredondo, 7 de octubre de 2016
Como siempre, Gaude, ¡más claro, agua!
ResponderEliminarGracias Piscator. Cierto es que hay tantos tipos de animales que hasta perdemos la cuenta.
ResponderEliminarAbrazos de un animal rural.
Muy esclarecedoras, Gaude, tus conclusiones y excelentemente argumentadas. Por mi parte, yo también señalo en mi glosario "En torno a las palabras de Delibes", que tiene la acepción de 'parásitos". Sería bueno que algún veterinario rural profundizara sobre la cuestión. Abrazos y gracias.
ResponderEliminarQué duda cabe, Luciano, de que la acepción parásito le viene como anillo al dedo al galápago (lombriz) que parasita, en este caso, a la oveja. La primera acepción que, actualmente, nos da la RAE es muy esclarecedora, (aunque ahora cabría aplicar la acepción tercera).
EliminarDelibes -él lo dice de vez en cuando- se nutre del lenguaje rural y, en éste lenguaje, galápago es el que ya hemos descrito. Después vendrá Corominas y otros sabios y darán sus propias y respetabilísimas opiniones. ¡Por cierto! ¿Qué deberán decir cuando dentro de unos pocos años, encuentren: “como dice Urdiales -estudioso y experto en Delibes- en sus diccionarios, galápago es una enfermedad que mata a la oveja en diez o quince días”?
Para no aburrir con mis cosas: a veces la oveja –modorra o no- expulsa por la nariz, al estornudar, una especie de lombriz y, a este parásito, también le llamamos galápago.
De todas maneras, para este ex pastor, aporreador de teclas, Delibes nunca dijo que el galápago fuera una enfermedad de la oveja.
Gracias, un abrazo y ánimos para aclarar conceptos.