Debo empezar -otra vez más- por decir que escribo –o como se llame esto que hago- desde un pueblo muy pequeño de la provincia de Valladolid llamado Camporredondo. Es tan pequeño que en la actualidad somos aproximadamente 150 habitantes y cuando más habitantes hubo fueron unos 600. Digo todo esto para que, quizás, se pueda entender que es muy difícil que hasta aquí pudiera llegar desde el otro lado del “charco” la palabra que trataré de presentaros hoy: cachapada.
Ya sabéis que soy aficionadillo a
estas cosas que nuestros abuelos manejaban a las mil maravillas: el lenguaje
rural.
Bien. Tengo recogidas bastantes
palabras que creo están a punto de desaparecer –o desaparecidas- y que como
llevo bastante tiempo en el empeño, pensé que ya no habría ocasión para
rescatar del olvido ninguna más. Pero ¡héteme aquí! hace unos días un señor de
mi pueblo (Pedro Ajo Barrero) escribe en Google un artículo sobre los buzones
de correos y nos dice: “(…) Después de estar casi una tarde entera para elegir un buzón, porque no veas la cachapada de modelos de buzón que allí había”. (…) Visto lo visto y leído lo leído, no pude evitar
una exclamación malsonante; acababa de rescatar para el “Diccionario de
Camporredondo” otra palabra que, a mí -a pesar de haberla usado cachapada de veces- se me había
escapado. No cabe duda que se me habrán ido otras muchas, pero que se me escape ésta no tiene (tengo) perdón de Dios. Es una palabra que mi hermano Alfredo (e.p.d.), once años mayor que yo, usaba siempre que tuviera que hacer alusión a una gran
cantidad de algo… ¡qué cachapada de… –lo que fuera- había!
Busqué y busqué la palabra -siempre con
resultados negativos- en diccionarios habidos y por haber y “nada de nada, nada”,
por ninguna parte… nada. Hasta que pensé: si decimos cachapada para referirnos
a gran cantidad de cosa, y no existe, busqué la cosa en singular y… zas allí
estaba cachapa.
Como ya era más fácil seguir el
rastro: el rastro seguí. Encontrando que en casi todas partes se refiere a una
especie de tortilla que se hace en Colombia y Venezuela.
Relacionado con cachapa encontré
cachapera y cachapera -en estos países- se lo aplican a la mujer que hace
cachapas (tortillas) y también a la mujer lesbiana.
¡Anda! me dije, en Venezuela y
Colombia, a la mujer lesbiana le llaman, también, cachapera, y en España a la
mujer lesbiana le llaman tortillera. O sea, la palabreja parece que no es ajena
al castellano mas tradicional y, por ende, rural.
Cachapa.- Venezuela y Colombia:
Tortilla.
Cachapera.- Ven. y Col. Mujer que
hace cachapas y, también, mujer lesbiana.
Tortillera.- España: mujer que hace
tortillas y, también, mujer lesbiana.
A partir de aquí, ya estoy
preguntando: ¿vosotros creéis que mi hermano Alfredo estuvo alguna vez en
Venezuela o Colombia y se trajo para acá la palabra cachapada? Yo os puedo
asegurar que no. A partir de ahí lo que pienso es que la palabra cachapa
(tortilla) viajó allende los mares y allá se quedó, como otras muchas palabras
que nosotros olvidamos, pero que nuestro hermanos, allende los mares, conservan
como oro en paño.
Así que, desde este momento, a la
tortilla también llamaré cachapa y a Pedro Ajo Barrero le estaré eternamente
agradecido por rescatar, para nosotros, cachapada. Palabra que nuestros abuelos,
y nosotros, usábamos, pero que, como por
arte de birlibirloque, nos hemos cargado.
¿Algún comentario? Pues nada, aquí
seguimos esperando cachapada de palabras en trance de desaparecer.
Camporredondo 11 de septiembre de
2016
Querido Gaude: Confieso que desconozco esta palabra (nunca te acostarás...) y me parece que has hecho un buen esfuerzo al relacionarla con, para el DRAE, americanismos "cachapa" y "cachapada". Sin embargo, dado el significado que señalas que tiene 'gran cantidad', no me parecería descabellado que pudiera tratarse de una variante, perfectamente legítima, de "capachada"derivada de "capacho". Sólo te puedo hacer esta humilde aportación. Abrazos.
ResponderEliminarAmigo Luciano: no hay duda –así lo pienso- que la palabra “cachapada” se refiere a una indeterminada cantidad de cachapas, o de otra cosa, igual que pollada se refiere a un conjunto de pollos. Lo que queda por saber, o constatar, si cachapa y tortilla es lo mismo, algo que, después de lo visto, creo que se podría afirmar. De ahí mi convencimiento de que la palabra viajó, pero sólo llevaba billete de ida.
EliminarLo que sí es incuestionable es que hasta este pequeño pueblo –al que casi no había ni carretera- nadie pudo traerla para dejárnosla de recuerdo. Aquí ha ido transmitiéndose de generación en generación, a través de la palabra. Así llegó hasta este aficionadillo. Ahora intentaré airearla un poco más.
Me sorprende que no la hayas oído, porque de Valladolid hacia el norte de Castilla y León –por lo que yo he podido comprobar- se dice, por ejemplo.- Cachapada: serie de cosas de la misma especie. “Allí nus dejóu una cachapada de peras.”
Gracias, un abrazo y seguiremos buscando cachapada de palabras. ¡Todo por el lenguaje rural!