sábado, 5 de enero de 2013

La Cocina de cartón


Es la historia de las humillaciones y el desprecio hacia la llamada clase baja, cuando no se respetaba ni la dignidad, ni los sentimientos, de los llamados humildes por el solo hecho de ser trabajadores.



Era norma de la empresa -en la que el padre trabajaba- tener por navidad una atención con los hijos de sus trabajadores. La fecha del seis de enero (día de los Reyes Magos) se acerca. Los empleados de la empresa pueden pasar por las oficinas para ver las fotos de los regalos que ese año tendrán sus hijos, y sobre ellas elegirán.

Los padres nunca tuvieron ocasión de elegir juguetes. A veces los Reyes Magos, en la noche del día cinco, les ponían una peseta en los zapatos. Fortuna que, por la mañana, será la madre responsable de administrar, seguramente para comprar el pan. Otras veces quizás fue una naranja lo que los reyes depositaban en los zapatos, limpios para la ocasión. Por eso aquel día era tan especial y, al ver las fotos…

¡Qué cocina tan bonita! cómo va a disfrutar mi niña cuando la vea. Los padres eligieron quizás el primer regalo de reyes de toda su vida. Con toda emoción preparan la llegada de los magos y van ilusionando a la niña con lo que les han contado sobre una cocina enorme y bonita que, llegado el día, le traerán porque ha sido muy buena y se lo merece.

La niña se ilusiona, todos los días pregunta si hay noticia de los Reyes Magos, quiere verlos, quiere agradecerles su regalo. Los Reyes Magos son muy buenos ¿verdad? Pregunta la niña a su mamá.

Ha llegado el día, los juguetes, embalados en cajas fastuosas, son distribuidos entre los trabajadores por los reyes (empresa). Qué felicidad, la noche se hace larga. Por la mañana los padres observan cuando la niña se levanta y se queda admirada ante su premio, porque ha sido buena.

Recoge la caja, la abre y, con pena, exclama: papá, la cocina es de cartón y está rota. La rabia se apodera del padre y, con lágrimas contenidas, le dice a la niña: mira hija, es que me han dicho los Reyes Magos que se habían acabado la que tú habías pedido porque, como era tan especial, muchos niños la han pedido y no había para todos, pero que no te preocupes que en pocos días te enviarán otra más bonita, porque tú te la mereces.

El día siete de enero los padres pasan por la carpintería, recogen madera, unas tenazas, un serrucho, clavos, cola y pintura. Ese mismo día se ponen a trabajar en la construcción de la cocina sin más conocimientos que los que el amor les va dictando. Primero dibujan hasta que encuentran el modelo que está a la altura de los merecimientos de su niña y se ponen manos a la obra. Todos los días, después de su larga jornada de trabajo, sobre el suelo y ayudándose de una silla para los cortes, los padres reanudan su más ilusionante tarea. La amplia cocina va tomando forma tiene todo lo que tenga la cocina más moderna de la época: dos pilas para lavar los platos, agua corriente, fuego, luz eléctrica, armarios suficientes para colocar todo el menaje del hogar…

Si la cocina tuvo un problema, fue que ocupaba demasiado espacio en la casa.
Al cabo de un tiempo, cuando la niña fue cansándose de jugar en ella, pasó al cuarto trastero y allí, poco a poco, fue deteriorándose y acabó donde acaban todos los juguetes: en el cielo de los juguetes.

Pasados 40 años la niña le cuenta a su hija la historia de la cocina más bonita que jamás haya existido, lamentando su desaparición.

Conclusión: nunca permitáis que nadie juegue con los sentimientos de un niño. Siempre hay algo que podemos hacer para defender nuestra dignidad.

El pastor

3 comentarios:

  1. Si el seismo se produce en la profundidad del alma, nada, ni nadie será capaz de controlarlo.

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  2. Por error había eliminado este comentario. De nuevo lo expongo.




    Un relato donde unos padres se sintieron humillados al recibir tal nefasto regalo de la empresa para su hija. Pero no se amilanaron, lucharon, tuvieron el amor propio y el valor por complacer a su hija. En sus almas se produjo un seísmo que como bien dice Gaude " nada, ni nadie será capaz de controlarlo ".


    En cuanto a la dignidad, hay que tener a alguien que te enseñe a defender tu dignidad como ser humano. Nadie nace aprendido.

    Para vivir con dignidad debes saber qué quieres de la vida, saber quién eres, respetarte, y quererte.

    Otra cosa que debemos aprender es a saber diferenciar entre lo que es el "amor" y lo que es la "dependencia".. Quien te ame te va a respetar, comprender y aceptar, en cambio, la dependencia te hace renunciar a tus propias ideas, pensamientos y decisiones con tal de satisfacer los deseos de la otra persona. . Es mejor alejarse de aquellas personas (amigos, pareja o familiares) que solo desean hacer su voluntad egoístamente en tu vida sin respetar tu propio criterio.

    Solo así seremos personas seguras y sabremos defender nuestra integridad física, psicológica y emocional. Y nadie gobernará tu vida, ni tomará decisiones por tí , ni pasará sobre tu propia voluntad.

    Para vivir con dignidad, debes luchar. ¿Cómo ? : Tienes mente para pensar, corazón para sentir, manos para actuar y pies para andar, además de una boca para expresar tus puntos de vista e ideas, pero siempre hazlo con educación. (La educación es otra materia que para tenerla se necesita a alguien que te lo enseñe ).

    La Dignidad siempre puede recuperarse, nunca hay un momento en el cual la hayas perdido, solo has dejado de defenderla. Protege tu dignidad, aprende a respetarte a tí mismo y a no dejar de ser TÚ por nada ni nadie.

    Si alguien quiere pisotearte ¡¡ escúpele en la cara ¡! y continua con firmeza tu camino, con la cabeza alta, no se puede vivir con la cabeza siempre agachada , así no podrás ver La Belleza del Universo.

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  3. El coraje no siempre ruge,
    Algunas veces
    es una silenciosa
    pero poderosa
    voz interior
    que dice :
    mañana lo volveré
    a intentar de nuevo

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