Usted, seguidor de “En camisas de once varas”, se va a
sorprender: ¡No estoy de acuerdo con lo que el experto en la narrativa de
Miguel Delibes nos dice! Cosa rara ¿verdad? Bueno, pues así es y verá usted por
qué:
Página 36 del DEPNMD.
A espetaperro: A
bocajarro.
D1C p. 127. Ahora me doy
cuenta de que con lo de la calefacción obre un poco a espetaperro.
Es Delibes muy dado a utilizar la
palabra a espetaperro; en varias de sus obras lo hace. Pero debemos entender lo
que el escritor dice antes de que saquemos nuestras conclusiones. Cuando –por
referirnos al caso de la calefacción- Delibes dice que Lorenzo, el cazador, obró un poco a espetaperro nos está diciendo que
habló sin pensar lo que decía (“Las cosas
hay que pensarlas”), de lo cual parece arrepentirse.
¿Qué diferencia hay entre “a bocajarro” y “a espetaperro’? Pues que
el primero indica proximidad, pero con todo el tiempo del mundo para preparar lo
que se dice (lo prepara y lo suelta a
bocajarro o quemarropa) y el segundo indica precipitación, sin pensar lo
que se dice. Si lo referimos al disparo, yo creo que debemos diferenciarlo,
porque el disparo “a bocajarro” es
un disparo tan próximo que la pólvora puede llegar a quemar (a quemarropa) aquello
sobre lo que se dispara, tal es su proximidad. Porque si no, no sería a bocajarro. En cambio el disparo “a espetaperro” es un disparo sin
preparación, rápido, súbitamente, a espetaperro, pero la distancia puede
ser toda la que usted quiera con tal de que piense que los perdigones pueden
llegar a su destino.
O sea: lo que Delibes nos dice es
que Lorenzo no dijo lo que debería de haber dicho si lo hubiera pensado: lo soltó “a espetaperro". Si hubiera querido
decirnos que se lo dijo en la cara o, mejor dicho, pegado al oído, nos habría
dicho que se lo soltó a bocajarro.
De manera que si lo dijo a espetaperro es porque no lo pensó.
Distinto a que se lo hubiera dicho a
bocajarro pero después de pensarlo el tiempo necesario para dar la
respuesta adecuada.
Resumiendo:
A espetaperro.- Hecho o dicho sin ninguna preparación, pero sin tener
en cuenta la distancia.
A bocajarro.- Hecho o dicho con preparación, o no, pero,
necesariamente, en corta distancia
“A bocajarro” y “a espetaperro” sí, pero no es lo mismo.
RECORDANDO: HABLO DESDE EL
PUEBLO, NO DESDE LA ACADEMIA.
¡Magnífica la distinción y muy bien razonada! El "experto" no capta estas sutilezas, lo mismo da la velocidad que el tocino. La prensa y las instituciones apoyan cualquiera de sus glosas porque están a favor del surrealismo y el humor..
ResponderEliminarY digo yo: después de todo ¿no dará igual? Bueno pues no, no da igual.
EliminarGracias